Para quien vive en casas o apartamentos donde la seguridad es importante, el timbre inalámbrico con cámara de FONCBIEN puede ser muy útil. Imagina que estás fuera o en casa y no quieres andar abriendo sin saber quién llama; este aparato te manda una notificación al móvil nada más detectar movimiento o cuando alguien toca el timbre. Además, soporta hasta 3 usuarios viendo el vídeo a la vez, así que si vives con más gente, todos podréis estar tranquilos.
Otra cosa que mola es su visión nocturna en HD, que funciona genial incluso en oscuridad total. Eso evita tener que salir a ciegas por la noche o perder detalles, y la imagen se guarda en la nube durante 3 días, por si necesitas revisar quién ha pasado. Su diseño en negro queda discreto y la instalación es sencilla, que siempre se agradece si no eres un manitas. Parece un dispositivo bastante práctico para controlar quién entra sin complicaciones.
El videoportero Goliath con su pantalla táctil de 7" en HD y conexión WiFi es ideal para quienes buscan controlar quién llama desde cualquier lugar, ya sea en casa o fuera de ella. La cámara de 2 megapíxeles con visión nocturna asegura que puedas ver bien a tus visitas a cualquier hora, y el ángulo de 150° amplia el campo de visión para no perder detalle. Además, el diseño empotrado resulta elegante y discreto.
Lo que me gusta es que soporta bien el mal tiempo y posibles intentos de vandalismo gracias a su certificación IP65 e IK10, así que es resistente para exteriores sin complicarte. También tiene una placa iluminada para que cualquiera sepa dónde tocar sin problema en la oscuridad. Para quien no sea manitas, la instalación viene con todo el kit necesario y parece bastante sencilla, lo que siempre se agradece. En resumen, es un sistema fiable que cubre bien las necesidades básicas y un poco más.
Para quien busca controlar quién llama a la puerta sin estar obligado a ir corriendo, este videoportero TMEZON con pantalla táctil de 10 pulgadas es bastante práctico. Puede venir genial si sueles recibir visitas inesperadas o si quieres vigilar la entrada cuando no estás en casa, porque se conecta por Wifi y manda notificaciones al móvil. Así puedes hablar con quien esté fuera, o incluso abrir la puerta desde cualquier sitio, lo cual es útil si tienes niños o paquetes que recoger.
Algo que me mola es que graba automáticamente o saca fotos cuando alguien toca el timbre o detecta movimiento, almacenando todo en una tarjeta Micro SD (hasta 256 GB). Esto te da un extra de seguridad sin tener que estar pendiente todo el rato. Además, el diseño es muy moderno y delgado, no parece un aparato antiguo ni pesado, así que no desentona en el rellano. En definitiva, parece un dispositivo que facilita la vida diaria sin complicaciones.
El timbre con cámara inalámbrica de Goshyda es ideal para quien quiere controlar la entrada de casa sin complicarse con cables o depender solo del móvil. Sobre todo si en casa hay personas mayores o niños que prefieren un monitor para ver quién llama sin tener que levantarse o usar un smartphone. La cámara HD con lente de 70° captura bastante bien todo el espacio, y el detalle de grabar en 1080P ayuda a no perderse nada justo en la puerta.
Me parece un puntazo que tenga visión nocturna gracias a las luces infrarrojas, porque así no hay que preocuparse si llaman a horas de poca luz. Otro plus es que funciona con batería tanto el timbre como el monitor, lo que asegura que no te quedes sin control aunque haya un apagón. En resumen, parece un dispositivo fiable y práctico para tener un extra de seguridad sin líos técnicos ni instalaciones complicadas.
Este sistema de intercomunicación de video inalámbrico de EasyByMall está pensado para quienes buscan más seguridad y comodidad en casa sin complicarse con instalaciones difíciles. Va genial para pisos, chalets o hasta oficinas pequeñas donde no quieres lío con cables ni obras, porque admite métodos de instalación sin taladrar, que siempre se agradece. Además, su diseño compacto (5.08 cms de alto x 12.7 cms de largo x 10.16 cms de ancho) y en negro tiene un aire moderno que no desentona.
Lo que parece curioso es su pantalla grande de 4.3 pulgadas, perfecta para ver a quien llama sin tener que acercarte a la puerta, y la calidad HD con 300.000 píxeles que promete imágenes claras para identificar bien a los visitantes. La comunicación bidireccional inalámbrica facilita hablar sin cables en medio, algo que simplifica bastante la experiencia. No es un sistema superpremium, pero si buscas algo práctico y eficaz para el día a día, esta opción tiene pinta de cumplir sin dar más problemas de la cuenta.