Los mejores tocadiscos automáticos del 2025

El Audio-Technica LP3XBTBK es un giradiscos perfecto para quienes quieren disfrutar de vinilos sin complicaciones y con la comodidad del Bluetooth. Su diseño en Black no solo es elegante, sino que además pesa 4.95 kg, lo que le da una estabilidad que suele garantizar una reproducción más fiel. Ideal si tienes altavoces inalámbricos en casa o simplemente quieres evitar líos de cables sin renunciar a esa sensación vintage de poner un disco.

Un punto que me parece muy útil es el control hidráulico en el brazo, que hace que bajar y levantar la aguja sea suave y preciso, evitando que se cargue el disco o se desgaste la aguja demasiado rápido. Además, la cápsula es compatible con varias agujas de la serie VM95, lo que viene genial según el tipo de sonido que prefieras o el presupuesto que tengas. Que además funcione a dos velocidades (33 1/3 y 45 rpm) y sea automático facilita mucho la experiencia, sobre todo si no eres un experto. Para un setup casual pero con ganas de buena calidad, tiene pinta de que cumple bien.

Para quienes trastean con tocadiscos y valoran que la calidad del sonido no se vaya por un mal ajuste, este medidor de presión digital de ALLmeter puede ser un aliado bastante práctico. Su precisión es notable, capaz de medir hasta 0,01 g, lo que facilita dejar la aguja en su punto justo y evitar esos molestos saltos o desgastes prematuros de los vinilos. Además, la compatibilidad con varios tipos de pastillas (MM, MC y más) lo hace versátil, ideal tanto para principiantes como para quien ya controla un poco.

El diseño compacto (22.86 cms de alto x 7.62 cms de largo x 5.08 cms de ancho) junto a un kit muy completo con calibrador VTA, peso y hasta batería, ayuda a que la calibración no se convierta en un lío. Detalles como la función de tara o el apagado automático demuestran que está pensado para usar sin complicaciones, un plus cuando estás ajustando con cuidado. No es algo para todo el mundo, pero si llevas en serio el vinilo, merece la pena echarle un ojo.

Este tocadiscos de Mersoco en Blue es ideal para quienes disfrutan del vinilo pero no quieren renunciar a la comodidad de la tecnología moderna. Gracias a que funciona con Bluetooth, puedes conectar el móvil o el portátil sinrollos de cables y escuchar esas listas de reproducción digitales cuando no tengas un disco a mano. Además, al ser compacto y ligero (2.25 kg) con diseño tipo maletín, es fácil de mover de una habitación a otra o incluso llevarlo para una quedada con amigos.

La opción de tres velocidades (33/45/78 RPM) es un plus si tienes una colección variada de vinilos, y los altavoces estéreo integrados de buen rango hacen que no necesites enchufarlo a un equipo externo para disfrutarlo. También aprecio que tenga entrada auxiliar y salida para auriculares, porque siempre es práctico poder conectar otros dispositivos o escuchar sin molestar. Por tamaño (114.3 cms de alto x 33.02 cms de largo x 25.4 cms de ancho) y funciones, parece un equipo equilibrado para alguien que quiere un setup sin complicaciones pero con buen sonido.

Este tocadiscos Aiwa en madera tiene un rollo vintage pero con funciones que realmente facilitan la vida a cualquiera que quiera revivir vinilos sin complicarse. Ideal para quienes disfrutan de la música en casa, ya sea para ambientar una reunión o simplemente desconectar. Gracias a su tamaño compacto (15.24 cms de alto x 2.54 cms de largo x 22.86 cms de ancho) y su peso moderado (4.05 kg),no ocupa mucho espacio y se puede mover sin problemas.

Lo que me parece bastante práctico es la combinación de puerto USB y ranura SD, porque no solo puedes pinchar vinilos, sino también reproducir y grabar música digital. Esto junto con la conexión Bluetooth v.5.0 da mucha versatilidad para quienes quieren mezclar lo clásico con lo moderno. Además, tiene retorno automático del brazo, que es un alivio para no estar pendiente todo el rato. Si buscas algo con diseño auténtico pero que no sea solo un adorno, este tocadiscos cumple bastante bien.

Para quien le guste el rollo retro pero también quiere modernidad, este tocadiscos Lauson en naranja tiene pinta de encajar bien. Es perfecto para personas que tienen vinilos y también tiran de música digital, porque además del vinilo, puedes conectar el móvil por Bluetooth y escuchar listas desde el sofá. Lo bueno es que no hace falta montar un lío raro ni poner altavoces extra; viene con todo integrado y su diseño vintage le da un toque guay a cualquier rincón.

Lo que me parece súper útil es que graba directamente de vinilo a USB en MP3, así puedes digitalizar tus discos y no preocuparte por perder esas canciones. Otro detalle es que reproduce 3 velocidades distintas y tiene parada automática, algo que evita que el brazo haga ruido cuando termina. Por lo que he visto, da sensación de ser robusto y fácil de usar, con garantía de dos años del fabricante. En resumen, tiene pinta de ser una opción práctica para mezclar lo clásico con lo nuevo sin complicaciones.